Datos Básicos: A pesar de las bajas de última hora, debido a una muy sentida pérdida dentro del club, 39 fuimos los socios y familiares, 9 menores de edad, los llamados a disfrutar con las actividades del día, que inicialmente amaneció con ligera lluvia, pero después no apareció en el resto de la jornada.
La práctica totalidad nos reunimos a la entrada de Layos a las 10:30 horas, inicialmente en Toledo un escaso número a las 10:00 horas y la dimos por concluida sobre las 18:00 horas, una vez concluida la degustación de un magnifico cocido en Casa Benito (Layos). A veces la publicidad es una merecida recompensa a un buen servicio.
Crónica: La Excma. Diputación de Toledo respondió a una solicitud tentativa del club y nos admitió entre las instituciones a las que se les facilita plantas a través del vivero educativo “TAXUS”, para jornadas de concienciación del medio ambiente, repoblaciones forestales, uso de escuelas taller, etc. Nuestro inicial escepticismo se diluyó ante los plantones y armados con cubos, picos, palas, azadas y con plantones de plantas autóctonas (Fresnos, olmos, quejigos y robles) nos dispusimos a organizar nuestras primeras jornadas con esa finalidad.
La tierra fértil de las orillas del embalse de Layos, mullidas y fáciles de cavar, fueron el marco adecuado, en zona protegida y próxima a la humedad del agua, para implicar a los nueve más pequeños en una lección de amor a otros seres vivos y además……¡Escribir un libro, tener un hijo, plantar un árbol…..! Facilitamos que algunos llevasen ya parte del trabajo hecho. Esta experiencia piloto, agradable, nos hará redoblar esfuerzo para la próxima campaña de la Diputación a la que pediremos reiterar esfuerzos, enseñanzas y experiencias para todos y especialmente para los más jóvenes.
Concluida la primera actividad, a las 11:30 horas, iniciamos el recorrido de los casi 4 kilómetros que nos llevaría hasta la presa del embalse. Solo fue precisa una mínima parada intermedia, en un grupo compacto para lo numeroso que fue y con un comportamiento magnifico de los pequeños.
Las últimas lluvias y las benignas temperaturas, han hecho que la naturaleza se muestre en una de sus mejores épocas, el suelo blando y con corta hierba, autentica alfombra para nuestros pasos, el romero y tomillo expeliendo sus mejores fragancias y los almendros en plena eclosión de ramilletes de densas y blancas florecillas, son una delicia para nuestros ojos.
En la presa hicimos la parada central de la ruta, fue buena ocasión para las amenas conversaciones de los mayores, mientras los pequeños daban riendas a sus muchas energías, ganas de jugar y de disfrutar de la naturaleza, magnífica en un día, que por ausencia de lluvia y buenas temperaturas acompañó especialmente.
Concluido el descanso y pequeño tentempié, repetidas las fotos de grupo y familia tremolando bandera del club, en esta ocasión enarbolada por los más pequeños, iniciamos el camino de regreso hasta los vehículos, para iniciar el ultimo reto, el de “los tres vuelcos del cocido y postre” con los que dimos por concluida una magnifica jornada. ¡Repetiremos experiencia!.